Que facilidad que tienen las cosas para irse a la mierda. Si es así,  cuesta tanto encontrar el equilibro emocional que cuando lo tenemos se va tan fácilmente que nadie lo entiende. Cada persona  va tratando de hacer sus cosas para bien de ellos y de la gente de su entorno, todo es acción y reacción de la reacción otra acción que vuelve con otra reacción… así sucesivamente, todo es un circulo!

A lo largo de nuestras vidas solemos tomar miles de decisiones que cambian la estructura de todo lo recorrido, hacemos y deshacemos de acuerdo a los impulsos, el muy sigiloso destino, el humor, las opiniones o vivimos de lo que nos pasa diciendo la frase típica “paso lo que tenia que pasar”, pero no es así. En el camino que recorremos cada uno es responsable de sus propios actos, puede que tengamos un destino marcado pero nosotros decidimos que puerta abrir, somos personas autónomas por lo tanto podemos fijar nuestras propias reglas y normas. Ser autónomo es libertad y la libertad es un acto de desobediencia..

Solemos siempre culpar a alguien externo a nosotros por nuestro sufrimiento, pero debemos ser concientes de que si depende de ellos este sufrimiento que tenemos es muy probable que no podamos hacer nada para cambiarlo ya que nosotros no manejamos a los demás. Debemos, nos corresponde y somos los responsables de nuestras vidas, de nuestros sufrimientos, de nuestro dolor, de todo lo que nos sucede de lo que sucedió y de lo que sucederá. “Estas son las semillas que sembramos cada uno de nosotros, ahora nos toca hacernos cargo de la cosecha”.

Por eso depende de cada uno de nosotros hacer que las cosas sigan el ritmo que queremos y aunque nos parezca que todo esta muy mal siempre hay algo bueno, lo mas mínimo que sea pero esta.